A pesar de las facilidades actuales para hacerse con un terminal nuevo de telefonía, lo cierto es que hay situaciones en las que bien la economía, la disponibilidad o las circunstancias de amortización en las que se encuentra nuestro dispositivo móvil, nos llevan a la reparación de móviles antes que a la tienda para comprar uno nuevo. Los casos a enumerar son varios pero los más evidentes pasan primero por la garantía caducada.
Para que no ocurra este supuesto, todos los vendedores recomiendan contratar un seguro adicional en el momento de adquisición del dispositivo y, aunque parezca que únicamente velan por su comisión, es muy práctico a la larga para evitar una reparación iPhone. Y es que en muchos móviles la garantía es de 2 años pero en otros ya es de uno tan sólo, y por ello el servicio técnico del fabricante ya deja de tratar al terminal como tutelado en cuestiones técnicas y convierte al cliente en uno inicialmente nuevo.
Las averías más comunes están relacionadas con pantallas rotas y terminales pasados por agua, es decir, ambas situaciones que obedecen a accidentes fortuitos que llevan directamente al usuario a un servicio técnico especializado de reparación Samsung. Así pues, las tiendas generalistas que atienden solicitudes de todas las marcas, están llenas de demandas en este sentido, pero suelen tener repuestos en sus talleres que les hacen responder con mucha rapidez a sus potenciales clientes.
Aunque todo depende de las marcas, pero excepto alguna excepción puntual con marcas de nueva creación y residuales, como ocurre al comprar móviles chinos aunque tengan unas ventas considerables, las casas fabricantes que copan el mercado, surten bien a las tiendas especializadas en la solución de las averías de los terminales, ya que saben que no todo el mundo acude a los centros oficiales dado el elevado coste de su mano de obra.
Enfrentarse a los cambios de pantalla es pasar por la sustitución de la misma. Si sólo es el cristal, será más barato que si se añade el LCD que obliga a sustituir todo el dispositivo táctil al completo. Y cuando es por inmersión en agua, según el estado del terminal, así dictaminará el servicio técnico, que en muchos casos certifica la muerte del aparato. No obstante, los profesionales de la reparación de móviles examinarán el móvil para entregar el presupuesto al cliente según la avería a solucionar, siempre y cuando, tenga remedio.