Si hay algo de lo que hoy en día nos sería difícil prescindir es de los aires acondicionados, que desde hace ya algún tiempo, se han convertido en una parte de suma importancia para asegurar nuestro confort en la vida cotidiana. Puede que nos parezca algo relativamente moderno, pero ya los egipcios buscaban maneras (quizás poco ortodoxas) de refrescar sus palacios. Afortunadamente, gracias a las figuras de Lord William Thomson Kelvin y Willis Haviland, surgieron esos hallazgos que, allá por la segunda mitad del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX, permitieron afinar el método. Ciertamente, su evolución a través de la historia nos ha llevado hasta los equipos que conocemos actualmente, con una tecnología muy depurada y que nos ofrecen un servicio óptimo en tantas partes del mundo, sobre todo en aquellos ambientes sumamente cálidos y secos que hacen las condiciones de vida más difíciles. Uno de esos cambios que, sin duda, ha marcado nuestra forma de vida. Y en el futuro las bombas de calor marcarán la tendencia en sistemas de climatización.